jueves, 23 de agosto de 2012

I've Only Just Begun - the short music film




Una extraña belleza "película musical" que pone de relieve la lucha de la discriminación LGBT en Rusia y "en todas partes".

miércoles, 15 de agosto de 2012

TABÚ: La masturbación y el descubrimiento del placer.

Imagen inspirada en "Pop Art"


¿Acaso no es rico coger? Fue una de las preguntas que lanzo al  público, la cuentacuentos para adultos, Elena Vindel  en el marco de la “IX Feria Internacional del Libro en Guatemala, FILGUA 2012”. Temas como sexo, violación, sida, incesto, aborto y masturbación por mencionar algunos, fueron relatados de una manera explícita; Al notar por la reacción de algunos jóvenes y no tan jóvenes, esa noche la cuentacuentos logro mover muchos cimientos, hablando de temas que resultan un tanto incómodos para la sociedad. El murmullo más recurrente en la sala o por lo menos de las personas sentadas a mí alrededor, se hizo presente cuando el tema de la “masturbación” salió a escena acompañada de una almohada y una serie de movimientos y sonidos.

A mi mente vino una interrogante ¿Qué acaso la gente no se toca, al menos cuando se baña? Y de pronto algunas personas abandonaron la sala… y de nuevo otra pregunta surgió en mi cabeza ¿Conservadurismo, represión, catolicismo, ignorancia o hipocresía?
El tema de la sexualidad en sociedades conservadoras como la nuestra resulta todavía en la modernidad un tanto complejo de abordar. El morbo, la curiosidad, la fatal de información pero sobre todo la carga satanizadora hacia la sexualidad y el placer corporal por parte de la religión ha conseguido que en pleno siglo XXI los temas sexuales sigan siendo un tabú.

Social, política y religiosamente la utilización de nuestro cuerpo y específicamente la de nuestros genitales,  está condicionada por esa necesidad, por ese ideal, por esa obligación de reproducción, relegando al pene y a la vagina como órganos sagrados y consagrados a la idea de conformación de una familia por medio del cual el orden social y/o económico se pudiese mantener; A diferencia del ano, el cual no apunta a la reproducción y es el primero de todo los órganos en ser privatizado y ser colocado fuera del campo social, relegado al ano según Beatriz Preciado a los nuevos proletarios de una posible revolución Contrasexual (Gay y lesbiana).

Pero si el cuerpo humano, especialmente el pene y la  vagina hubiesen sido diseñados única y exclusivamente como órganos utilizados para la reproducción ¿Por qué sentimos placer al tocarnos? Sigmund Freud establece en su teoría del desarrollo psicológico que “Una región del cuerpo en que los proceso excitantes irritantes (tensiones) tienden a concentrarse, y cuyas tensiones pueden  ser eliminadas mediante alguna acción sobre tal región, como puede ser acariciar, recibe el nombre de zonas erógenas” este mismo afirma que las tres principales son la boca, el ano y los órganos genitales.

La construcción social y religiosa que se ha otorgado a los genitales, entonces conlleva a la culpabilidad, en casos frecuentes,  cuando un ser humano descubre que a través del contacto del genital con su mano u algún otro objeto adecuado (juguetes sexuales) puede obtener placer que lo o la pudiese llevar al orgasmo. La sociedad machista ha reprimido en varios aspectos de la vida a la mujer, su derecho a explorar su cuerpo y disfrutar de una sexualidad plena pero sobre todo sin miedo a expresarse libremente como un ser humano capaz de sentir placer y sobre todo de disfrutar de ese placer sin ser juzgada. Este sentimiento de culpabilidad que desata la masturbación surge entonces de la actitud que toman los adultos basada en los valores sociales y culturales aprendidos o mal aprendidos en la niñez, donde forjamos nuestra identidad y nuestra sexualidad.

Por muy inadmisible que parezca, muchas personas aún creen que la masturbación es un acto vil  cuando en realidad se trata de una práctica perfectamente natural que acompaña a los seres humanos desde temprana edad, si analizamos los años de infancia el mismo Freud asegura que durante la etapa Fálica que se da alrededor de los 3 y 5 años de edad, se adquiere importancia placentera en los órganos sexuales. Varios sexólogos afirman que dicha práctica es fundamental para la vida sexual de los seres humanos, no solo porque es el primer acercamiento del individuo hacia su cuerpo si no también es el primer acercamiento a conocer el placer.

Entonces, ¿Por qué habríamos de darle un significado negativo a una actividad que solo consiste en acariciar nuestro propio cuerpo? La masturbación debería de ser una práctica de autoconocimiento para lograr tener una vida sexual plena, sin limitar nuestro placer al permiso de otro ser humano. ¿Cómo vamos a exigir placer de otra persona si ni siquiera nosotros mismos sabemos donde esta nuestro propio placer? ¿Cómo queremos iniciar una vida sexual en pareja o parejas si no hemos iniciado con una relación sexual con nosotros mismos?

La educación sexual aprendida tanto en casa como en la escuela, las pautas culturales, las experiencias infantiles y los roles de géneros estereotipados y marcados por una sociedad heterosexual cuadrada, suelen reprimir a los seres humanos; A los hombres, cuando se es pequeño al igual que la mujer, se reprime la actividad de explorar con su cuerpo, pero cuando es adolecente o adulto esta práctica es tolerada sin tantos prejuicios, suerte con la que no corren las mujeres. Creer que la penetración es el único camino para lograr el orgasmo es una connotación machista que relega en el hombre y en su miembro la llave de la felicidad, el poder del placer de la mujer; es una concepción sesgada y errada, cargada de prejuicios y valores culturales las que le atribuyen un mayor valor al orgasmos alcanzado a través de la penetración, privando a la mujer de su derecho a estimularse a sí misma.

Cuando un ser humano conoce su cuerpo y sustrae los prejuicios, tabúes y culpas se siente más libre y está más cerca de encontrar el placer y la satisfacción que desea para sí mismo y para su pareja sexual.